Últimamente he aprendido a desacelerar, sosteniendo activos sólidos y disfrutando de la tranquilidad.
Después de alejarse del PVP de alta intensidad, todo el mundo se ha quedado en silencio.
Sin la ansiedad de la volatilidad a corto plazo, comencé a retomar una vida disciplinada:
Ejercicio, dormir temprano, levantarse temprano, trabajar de manera regular, reuniones efectivas, todo está volviendo poco a poco a un ritmo.
En este tiempo, estoy mucho mejor que antes, cuando me pasaba el día y la noche vigilando el mercado y buscando oportunidades.
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