Una figura conocida en el ámbito de los Futuros perpetuos compartió recientemente sus perspectivas sobre la tendencia futura de Bitcoin, prediciendo que para 2025 Bitcoin podría alcanzar los 250,000 dólares, y al menos llegaría a 150,000 dólares. Presentó cinco argumentos que apoyan esta predicción.
Primero, señaló que la política monetaria de Estados Unidos es el principal motor. La impresión masiva de dinero y la política de flexibilización cuantitativa aumentan los precios de todos los activos, mientras que Bitcoin, debido a su suministro fijo y su relativamente pequeña capitalización de mercado, se destaca especialmente cuando hay una afluencia de capital.
En segundo lugar, las expectativas del mercado sobre Bitcoin son claras. Se cree que es posible que Bitcoin alcance los 250,000 dólares a finales de este año, y que alcanzar un millón de dólares en los próximos años tampoco es imposible.
Tercero, a largo plazo, él tiene más confianza en Bitcoin que en otras criptomonedas. Su estrategia de inversión es comprar monedas alternativas subestimadas en el momento adecuado y salir a tiempo, con la esperanza de obtener rendimientos superiores a los de Bitcoin.
Cuarto, se espera que el regreso de los fondos institucionales impulse la demanda. Especialmente en Asia, debido a la baja confianza en el gobierno, los inversores tienden a asignar activos como el oro, los bienes raíces y las criptomonedas.
Finalmente, él cree que muchos de los tokens respaldados por capital de riesgo actualmente carecen de usuarios y productos reales, tienen valoraciones demasiado altas y no generan ingresos, lo que podría llevar a que más fondos se concentren en Bitcoin. Predice que solo cuando la tasa de dominancia del mercado de Bitcoin supere el 65-70%, otras criptomonedas podrían experimentar una temporada alcista.
En resumen, este analista considera que es muy probable que el precio de Bitcoin suba a 250,000 dólares, principalmente basado en la política monetaria expansiva continua de la Reserva Federal, la escasez de Bitcoin, el retorno de fondos institucionales, la disminución de la atractividad de las monedas alternativas y la preferencia de los inversores asiáticos por Bitcoin.
Para los inversores comunes, la diversificación puede ser una opción inteligente. Se puede considerar asignar fondos a dos carteras, una para mantener Bitcoin a largo plazo y otra para participar en el comercio de derivados basados en Bitcoin. Esta estrategia puede proporcionar cierta cobertura frente a las fluctuaciones del mercado a corto plazo, al mismo tiempo que mantiene el potencial de crecimiento a largo plazo.
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Una figura conocida en el ámbito de los Futuros perpetuos compartió recientemente sus perspectivas sobre la tendencia futura de Bitcoin, prediciendo que para 2025 Bitcoin podría alcanzar los 250,000 dólares, y al menos llegaría a 150,000 dólares. Presentó cinco argumentos que apoyan esta predicción.
Primero, señaló que la política monetaria de Estados Unidos es el principal motor. La impresión masiva de dinero y la política de flexibilización cuantitativa aumentan los precios de todos los activos, mientras que Bitcoin, debido a su suministro fijo y su relativamente pequeña capitalización de mercado, se destaca especialmente cuando hay una afluencia de capital.
En segundo lugar, las expectativas del mercado sobre Bitcoin son claras. Se cree que es posible que Bitcoin alcance los 250,000 dólares a finales de este año, y que alcanzar un millón de dólares en los próximos años tampoco es imposible.
Tercero, a largo plazo, él tiene más confianza en Bitcoin que en otras criptomonedas. Su estrategia de inversión es comprar monedas alternativas subestimadas en el momento adecuado y salir a tiempo, con la esperanza de obtener rendimientos superiores a los de Bitcoin.
Cuarto, se espera que el regreso de los fondos institucionales impulse la demanda. Especialmente en Asia, debido a la baja confianza en el gobierno, los inversores tienden a asignar activos como el oro, los bienes raíces y las criptomonedas.
Finalmente, él cree que muchos de los tokens respaldados por capital de riesgo actualmente carecen de usuarios y productos reales, tienen valoraciones demasiado altas y no generan ingresos, lo que podría llevar a que más fondos se concentren en Bitcoin. Predice que solo cuando la tasa de dominancia del mercado de Bitcoin supere el 65-70%, otras criptomonedas podrían experimentar una temporada alcista.
En resumen, este analista considera que es muy probable que el precio de Bitcoin suba a 250,000 dólares, principalmente basado en la política monetaria expansiva continua de la Reserva Federal, la escasez de Bitcoin, el retorno de fondos institucionales, la disminución de la atractividad de las monedas alternativas y la preferencia de los inversores asiáticos por Bitcoin.
Para los inversores comunes, la diversificación puede ser una opción inteligente. Se puede considerar asignar fondos a dos carteras, una para mantener Bitcoin a largo plazo y otra para participar en el comercio de derivados basados en Bitcoin. Esta estrategia puede proporcionar cierta cobertura frente a las fluctuaciones del mercado a corto plazo, al mismo tiempo que mantiene el potencial de crecimiento a largo plazo.